Ingredientes:
- 150 ml de leche tibia
- 100 ml de agua tibia
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 cucharadita de levadura seca (4 g)
- 1 huevo
- 3 cucharadas de aceite (50 ml)
- Unas gotas de vainilla
- Una pizca de sal
- 225 g de harina
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1 cucharadita de vinagre
- Aceite para freír
- Azúcar para cubrir los beignets
Instrucciones:
- En un bol, mezcla la leche tibia, el agua tibia, el azúcar y la levadura seca. Deja reposar durante 5 minutos para activar la levadura.
- Agrega el huevo, el aceite, la vainilla y una pizca de sal. Mezcla bien.
- Incorpora gradualmente la harina, luego añade la levadura en polvo y el vinagre. Mezcla hasta obtener una masa líquida y homogénea.
- Calienta aceite en una cacerola o freidora a fuego medio.
- Sumerge un cucharón en el aceite caliente para calentarlo ligeramente, luego llénalo hasta aproximadamente 3/4 con la masa para beignets.
- Alisa la masa en el cucharón con la ayuda de una cuchara untada en aceite.
- Sumerge suavemente el cucharón en el aceite caliente para liberar la masa y deja cocinar los beignets hasta que estén dorados por ambos lados.
- Repite el proceso para formar todos los beignets, calentando el cucharón cada vez para evitar que la masa se adhiera.
- Una vez cocidos, escurre los beignets sobre papel absorbente y pásalos por azúcar para cubrirlos.
Esta es una técnica sin amasar realmente práctica para preparar unos deliciosos y esponjosos beignets sin mucho esfuerzo. ¡Disfrútalos y comparte estos deliciosos beignets!