- Elige las patatas adecuadas. Debes seleccionar patatas de semilla certificada, que han sido elegidas por su capacidad para producir tubérculos sanos. Puedes encontrar patatas de semilla en tiendas de jardinería o en línea.
- Prepara el suelo. Las patatas requieren un suelo bien drenado y rico en nutrientes. Enmienda el suelo con compost o estiércol antes de plantar.
- Planta las patatas. Injerta las patatas de semilla a aproximadamente 15 centímetros de profundidad y con 30 centímetros de distancia entre cada una. Asegúrate de que los brotes estén hacia arriba.
- Riega regularmente. Mantén el suelo húmedo, pero no empapado.
- Fertiliza las patatas. Aplica un fertilizante equilibrado aproximadamente 6 semanas después de la siembra.
- Apila la tierra alrededor de las patatas. Cuando las plantas alcancen alrededor de 15 centímetros de altura, apila la tierra alrededor de los tallos. Esto ayudará a producir tubérculos más grandes.
- Cosecha las patatas. Las patatas están listas para ser cosechadas cuando las hojas comienzan a amarillear y marchitarse. Excava las patatas con un tenedor y déjalas secar al sol durante algunas horas antes de almacenarlas.
Aquí tienes algunos consejos adicionales para cultivar patatas en casa:
- Elige un lugar soleado para plantar las patatas.
- Protege las patatas de las polillas de la patata, que son insectos perjudiciales.
- Cosecha las patatas temprano para evitar que se vuelvan demasiado grandes y harinosas.
Con un poco de cuidado y atención, podrás cultivar tus propias patatas frescas y deliciosas en casa.