5 Veces en las que Decidí Separarme de Mis Plantas de Interior Sin Sentir Culpa

Introducción: Siendo amante de las plantas, puede ser difícil tomar la decisión de separarse de nuestros compañeros verdes. Sin embargo, después de más de 15 años de pasión por las plantas de interior, he aprendido que a veces la respuesta a la pregunta “¿Debería desechar esta planta de interior?” es ¡SÍ! En este artículo, comparto cinco momentos en los que decidí decir adiós a mis plantas sin sentir culpa.

  1. El Syngonium víctima de los trips:
    • Convivencia: Cinco años y medio (cuatro de ellos felices).
    • A pesar de mis esfuerzos por salvar mi Syngonium, una infestación de trips finalmente la venció. Después de más de un año de lucha, tomé la difícil decisión de separarme de esta planta que había compartido mi vida durante tanto tiempo.
  2. La Tillandsia que se marchitó misteriosamente:
    • Convivencia: Dos años.
    • La muerte repentina de esta planta fue decepcionante. A pesar de los cuidados regulares, se marchitó rápidamente sin una explicación aparente. Aunque estaba perpleja, decidí que era hora de dejar ir a esta Tillandsia.
  3. La orquídea que perdió todas sus hojas:
    • Convivencia: Dos meses.
    • Después de años de éxito con las orquídeas, una recién llegada perdió repentinamente todas sus hojas poco después de su llegada. No surgió ninguna explicación evidente, y a pesar de mis intentos, tuve que admitir que esta orquídea estaba más allá de cualquier salvación posible.
  4. La agave víctima de la pudrición:
    • Convivencia: Siete meses.
    • Un exceso de agua y una mala mezcla de tierra llevaron a la pudrición de esta agave. Aunque podría haber intervenido antes, acepté esta pérdida como una lección para el futuro.
  5. La Tradescantia en declive:
    • Convivencia: Cinco a seis años.
    • Incluso el amor de los aficionados por la Tradescantia no pudo evitar su declive. A pesar de mis múltiples intentos de salvar esta planta, las plagas y las constantes pérdidas de hojas tuvieron éxito en nuestra relación. Finalmente, decidí dejarla vivir su vida al aire libre.

Conclusión: Aunque la separación de las plantas puede ser difícil, es crucial reconocer cuándo es en beneficio de la planta y del propietario. Cada decisión se tomó con precaución, asegurando que mis plantas restantes continuaran prosperando. A veces, dejar ir a una planta en mal estado puede ser la mejor decisión para el bienestar de tu colección en su conjunto.

Leave a comment

Follow by Email